Sin mis gafas para amar de cerca apenas alcanzo a rozar breves puñados de palabras con olor a ti… y es que se que te quiero porque no tengo tiempo para erizar la piel de otros sueños. Pero si tuviera tiempo me faltarían las ganas, las ganas que son solo tuyas o para ti… como quieras, si quieres querer.
Sin mis gafas para amar de cerca soy un torpe hacedor de cosas rotas. Me salen rotas como nubes dispersas porque no se atarme los cordones de los zarpazos… tonto de mi, fa, sol, la, si… si, si; y luego dices que no tengo vergüenza. La tengo pero no me la puedo ver .
José A. Fernández D.