Si me pides que describa del revés el catálogo de mis sinrazones lo haré aunque has de saber que pueden terminar siendo razones.
Si me pides que desande lo andado a estas alturas de mi vida lo haré, aunque es bueno que se sepas que llegado a un punto terminaré gateando.
Si me pides que renuncie a mi amor por las abluciones mañaneras lo haré, pero tienes que saber que suelo llorar en sueños y también despierto.
Si me pides que abandone mi dieta de literatura erótica lo haré pero tendrás que asumir que entonces tendré las manos libres para acariciar con mas frecuencia los límites de tu piel.
Si me pides que saque la basura con mas frecuencia lo haré aunque terminé siendo odiado por algunos de mis jefes, profesores, clientes y demás corruptos.
Si me pides que aprenda a nadar lo haré pero sabes que me perderé en las profundidades porque desde hace años busco a esa sirena que me cuenta historias de poetas y locos.
Si me pides que invente poesías para ti lo hare pero has de saber que mi verbo es pobre y empalagoso y la imaginación que me mueve una torpe gallina ciega.
Si me pides que cierre libros y abra paseos por la playa lo haré pero no tendré historias inventadas que contarte.
Si me pides que no mire a las otras mujeres lo haré pero sabes bien que vamos a tener problemas tu, yo y tu otra personalidad.
Si me pides que recuerde bien cada instante de nuestro pasado juntos lo haré pero has de saber que llegará un momento en que no tendré tiempo ni espacio para el presente.
Si me pides que te regale la luna lo haré pero sabes que soy torpe envolviendo cosas esféricas.
Si me pides que rece todas las noche lo haré pero con la condición de que después me dejes entonar canciones de protesta.
Si me pides que abandone la feliz costumbre de trasnochar lo haré pero tienes que saber que madrugaré y madrugaré hasta que terminé por no acostarme.
Si me pides que paseemos cogidos de la mano lo haré pero has de saber que comeremos cogidos de la mano y cogidos de la mano iremos a esquiar.
Pídeme todo lo que quieras… haré todo lo que me pidas.
José Angel Fernández Díaz.